Una vez más, en tu nombre y en el de todos cuanto lucharon por VIVIR. Pasa el tiempo hermano y sigo hechándote tanto de menos... Es cierto que nos enseñaste a vivir, a entender las prioridades, a valorar aquellas cosas que se nos escapan y ya no pueden recuperarse... Ya no sé si lo he aprendído, no siempre puede llevarse a cabo, aunque te tengo muy presente en todo lo que hago. La vida pasa y con ello el tiempo nos separa más de ti, pero nada de lo que siento se esfuma. Todo sigue intacto, aunque seguímos aprendiendo a no tenerte cerca, a no verte, ni hablarte esperando respuesta. Es difícil, pero es lo que toca ¡¡ Ya no más vueltas... !! Desde siempre te dijímos que vives en nuestros corazones y ahí es donde estás. Aunque si soy sincera, en esos corazones quedan grietas por donde a veces aún pasa la rabia, el desconsuelo y la amargura de tener que aprender algo que no se quiere ¡ A estar sin ti, hermano ! - Por ti y siempre tú - Nunca te irás de aquí.
Esta enfermedad cruel te privó de todo lo que querías y nunca te rendíste. Yo, tampoco pienso hacerlo. Tú mientras tanto, sigue mandándome fuerzas.
Dicen que alguien a quien quieres y sigues recordando, no muere ¡¡ Tú nunca vas a morir, porque sigues donde tanto te queremos todos !!